Presentado por: Lisa Moore, Liga Junior de Austin, voluntaria de la comunidad
Baño, biberón, libros, cama. Las cuatro B que componen la rutina de mis hijas a la hora de dormir.
Aunque podemos saltarnos el baño, los otros tres no son negociables. Las botellas y los libros son demandados por mis chicas; la cama es nuestra demanda.
Mis hijas, por supuesto, podían y querían leer toda la noche.
La elección y la lectura de libros son la parte más emocionante del ritual de la hora de dormir. Los libros son los que evitan que nuestras niñas se peleen al subir las escaleras. Cada noche oímos "sólo uno más". Nos encanta evadirnos en una nueva historia cada noche. Conocer a los personajes y participar en sus aventuras es una forma maravillosa de terminar nuestros días, muchas veces agitados.
Cada noche me lleva de vuelta a leer con mi padre mientras crecía. Cuánto deseaba retomar lo que habíamos dejado la noche anterior. Creo que mi amor por los libros y el aprendizaje comenzó en el piso de ese dormitorio con mi padre. Puedo ver el mismo amor creciendo dentro de mis niñas cada noche.
Sólo uno de cada tres padres le lee a sus hijos todas las noches. BookSpring aconseja a los padres que creen una rutina para acostarse con sus hijos que incluya la lectura todas las noches.
Cepíllate los dientes, ponte el pijama, lee un cuento para dormir.
